En un suspiro llega la vida...
En un suspiro cambia la vida...
En un suspiro devolvemos la vida a La Vida.
Hablo por experiencia propia.
Cuando fui niña mi inocencia me permitía solo ver lo bueno de las personas, de las situaciones. Disfrutaba plenamente el presente, porque eso es lo único que existía para mi.
Fui "creciendo" y mi mente se lleno con la información de la interpretación que hicieron de la vida quienes me rodeaban...y yo creí en todo eso. Y culpe también a quienes me rodeaban por hacerme partícipe de un mundo que no me gustaba, pero que al mismo tiempo acepté permanecer en el.
La madurez no llega con el tiempo, ni se da con la edad, sino a base de querer ser mejor cada día, y aprender con y de las experiencias.
Hoy, no puedo decir que voy al inicio, mitad, o que he llegado a la meta; mas si que vivo cada día disfrutando lo mejor que entiendo en este momento el presente, agradeciendo los regalos y bendiciones de La Vida sin llevar pesadas mochilas a cuestas llenas de cosas vanas, odios o resentimientos que solo son un lastre y estorbo para vivir feliz.
Doy la bienvenida e inhalo La Vida que Dios me ha dado. Y profundamente agradecida envío mi oración de Amor al Universo.
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