viernes, 26 de junio de 2009

CUANDO NO DAMOS AMOR...

Cuando no recibimos amor creemos que se nos lastima, pero no es eso lo que nos lastima en realidad.
Nuestro dolor surge cuando no damos amor.
Nacimos para amar. Se puede decir que somos instrumentos de amor divinamente creados.
Desempeñamos nuestras funciones de modo más eficaz cuando estamos dando amor.
El mundo nos ha hecho creer que nuestro bienestar depende de que otras personas nos amen, pero ésta es la clase de pensamiento invertido que ha sido causa de tantos de nuestros problemas.
La verdad es que nuestro bienestar depende de que nosotros demos amor.
Se trata de dar, ya que en automático, recibimos.
Somos generadores de amor, no vanos consumidores.