RUNAWAY BRIDE

Un periodista maduro de un diario de New York está con el cierre de edición al cuello y una falta de ideas preocupante. En un bar, escucha el caso de una chica que ha escapado en varias ocasiones de la ceremonia nupcial, justo cuando está por subir al altar. Su fobia a dar el "Sí, acepto" la lleva a escapar literalmente de las formas más absurdas y "graciosas" posibles. El periodista escribe la nota, hablando de la "comehombres" con un inconsciente tono de descreimiento que lo hará recibir prontamente la respuesta del público femenino. Intrigado por el caso decide ir hasta Hale, un pueblo cerca de Maryland, donde ella vive, y averiguar personalmente cómo es la impulsiva chica.
Habrá quien piense que esta es una película para pasar el rato. Habrá quien piense que una situación así nunca le habría sucedido. ¿Mas cuantas veces nos habremos topado con que no sabemos lo que queremos realmente?
Por risíble que parezca, mas de una vez hemos pensado que un día nos fascina la pizza, y a la semana siguiente lo que nos fascina son las ensaladas. Somos cambiantes, eso es claro, pero ¿hasta que punto esto es bueno para ti?
En la película, la protagonista después de dejar al periodista en el altar sale corriendo (como las veces anteriores), mas ésta vez va en busca de ella misma. Se toma un tiempo para saber que es lo que le gusta a ella y no a sus novios en turno. Cuando ella descubre lo que quiere en la vida, es que entonces va en busca de el.
Lo mismo nos sucede a todos.
Cuando nos demos tiempo de hablar con nosotros mismos; cuando sepamos que queremos realmente; entonces iremos por ello.
Cuando la idea en la mente esta clara, todo el Universo se confabula para que tu deseo se haga realidad.

"Te garantizo que habrá épocas difíciles, y te garantizo que en algún momento uno de los dos o los dos querremos dejarlo todo, pero también te garantizo que si no te pido que seas mío me arrepentiré durante el resto de mi vida, porque sé en lo más profundo de mi ser que estás hecho para mí"