Una reflexion

A todo lo que tu llames "mío" tiene tu energía; y nada ni nadie te lo puede quitar.
Así: ¿A qué estás llamando mío? ¿Que cosas, situaciónes, o experiencias estás llamándolas así?
Píensalo. Tanto las cosas buenas, como las cosas que no te edifican, permanecen contigo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Yo soy una hija de Dios

FELICIDAD

LA ÚLTIMA RISA DE MAMÁ