LA PARÁBOLA DE LA OLLA DE LAS LANGOSTAS

Los cielos declaran la Gloria de Dios.
Los mares cuentan unos cuantos cuentos salvajes por su lado.
¿Alguna vez has visto a las langostas capturadas en una caja, apropiadamente llamada "olla para langostas"?
Cuando son acechadas, atrapadas y metidas dentro cestas, y son enviadas al mercado de mariscos, las langostas no escapan de sus captores... Lo que es misterioso es que las cestas no tienen tapas. No las necesitan.
Sip!, las langostas toman su última y solitaria caminata al mercado en una cesta convertible; apenas a solo unas cuantas pulgadas de su libertad...destinadas a ser cocinadas.
¿Qué es lo que las mantiene a ellas confinadas en su prisión de langostas, cuando todo lo que ellas tienen que hacer es escalar y correr (arrastrarse, escabullirse) hacia el agua?
Lo que mantiene atada a cualquier langosta a su exitoso encierro no es su prisión, sino sus camaradas presidiarias.
Cuando Louie la langosta decidió salirse fuera de la cesta, él se dirigió hacia lo mas alto, gateando sobre todo el montón de las demás langostas, quienes sin duda eran tan miserables como él. Y cuando Louie finalmente llegó a la parte mas alta de la cesta y trató de escabullirse fuera, no hubo oportunidad de un escape victorioso; las otras langostas lo agarraron, lo tironearon, y lo llevaron de vuelta a la cesta cada vez que lo intentó.
...He ahí otro decápodo comestible,... sentenciado a ser cocinado vivo.
Si tan solo estos crustáceos pudieran dejar de mirar sus miserias personales, y vieran que ellas están literalmente en la misma olla...y que la salsa tártara se está enfriando rapidamente...ellas podrían darse cuenta que la única manera de ser libres es ayudándose unas a otras a escapar.
Pero la naturaleza de ser langosta es lo que es.
Ellas permanecen cautivas; unidas por la cadena invisible de ser miserables juntas, cantando el "Blues de los mariscos".
La próxima vez que tu veas a alguien con sus ojos puestos en una meta, un proyecto, un premio, que nadie mas puede ver, no lo agarres por la cola y lo jales de regreso a vivir una vida mediocre. ¡Empújalos hacia arriba para salir!
¿Quién sabe?...Ellos podrían pensar en regresar para ayudarte a salir y triunfar a ti también.